Unas veces plantas un árbol
y alguien disfruta de su sombra.

Otras, un desconocido planta el árbol
y tú disfrutas de su sombra... 

Por eso, cuida ese árbol y cuida su sombra;
agradece su existencia 
y planta uno nuevo 
para quien venga después.

Es así como se sostiene el mundo.