Hace unos meses terminé un libro de poesía breve, inspirada en los haikus y los senryus. En él recojo reflexiones y pensamientos espontáneos. Es un capricho que quise compartir.
Ya se está diseñando la portada. En nada estará terminado.

Sabe mi alféizar
que los recuerdos entran
como a hurtadillas.